jueves, 7 de mayo de 2015

La carta robada (1844) de Edgar Allan Poe

La historia de un robo cometido a la sombra en un grupo de personajes políticos, es un cuento sensacional de misterio e intriga. Los hechos suceden en la ciudad de París, en concreto en un hotel, donde el prefecto de la ciudad se encuentra descansando. Una tarde llega a su poder una carta de suma importancia. Al saber la importancia de la carta el prefecto se reúne con uno de sus ministros en una habitación del hotel para discutir sobre lo trascendente que puede resultar esa carta para el futuro de ambos.
A la mañana siguiente misteriosamente la carta desaparece sin dejar rastro. El prefecto se pone en contacto con Dupin, un detective de prestigio de la ciudad, un Sherlock Holmes de París. El detective pone en marcha la búsqueda de la carta con la ayuda de un joven que hace el papel de narrador omnisciente de la trama. Se empieza la investigación y debatiendo de diversos temas ligados a la ciencia y a la psicología, entre acertijos y acertijos, Dupin consigue intercalar en el intelecto del joven narrador, quien tras ir descubriendo los acertijos dará con el escondite de la carta.

La carta, para sorpresa de todos, menos de Dupin y su joven ayudante. Se encuentra en un lugar muy común, a la vista de todos, el cual era imposible que pasase desapercibido. Este sitio, una pequeña caja encima de la chimenea, al ser un punto visible para todos era uno de los sitios que menos importancia daban dado que se encontraba a la vista de todos. Tras acertar con las soluciones a diversos enigmas ligados a la psicología de las personas, Dupin y su ayudante deciden ir por la carta engañando al poseedor de ella. Hacen un intercambio por una carta similar sin dejar rastro del cambio. El ministro jamás descubrió el cambio, dado que como dijo Dupin las personas son incapaces de mirar lo mas singular y sencillo de su entorno.

La maestría con la que Allan Poe mantiene al lector en un conjunto de enigmas, es sin duda su principal aportación a este cuento. El cuento no destaca por su trama, una trama sencilla que recuerda una novela policíaca de Holmes, sino por la mezcla de misterio con temas relacionados con la ciencia y la psicología. Los debates entablados entre Dupin y su ayudante dejan ver cómo el nivel de curiosidad de una persona puede llevar a cualquier individuo a desafiar y resolver cualquier adversidad que se le presente. El intelecto humano es capaz de dar con soluciones a problemas que a la vista de cualquier persona puede resultar imposible de resolver. A pesar de ser un novato, basta con un poco de reflexión y curiosidad para llegar al nivel de cualquier persona o hecho.

“Un cuento más que destaca por su enigma”

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